¿Qué es un material biodegradable?
¿Cuál es el proceso de biodegradabilidad?
¿Cuánto tardan en pudrirse según el tipo de material?
Si bien cualquier material puede descomponerse si se deja pasar el suficiente tiempo, el plazo entre la degradación de unos y otros es muy variable. La biodegradación es un proceso natural y, tarde o temprano, todos los elementos se reincorporan al medio ambiente.
El plazo, como indicamos, es algo muy variable. Los residuos y desechos orgánicos, por ejemplo, tienen un tiempo de degradación muy corto, de días o semanas. Los materiales sintéticos, a su vez, pueden llegar a tardar varios años en degradarse. Por este motivo, es buena idea reciclar los materiales de este tipo siempre que sea posible.
Ventajas de los materiales biodegradables
Estas son sus principales ventajas:
- No producen residuos. La principal ventaja de los materiales biodegradables es que, tras su degradación o reciclaje, no quedan residuos.
- Reducen las emisiones de carbono. La reducción de la huella de carbono es el principal motivo por el que optar por los materiales biodegradables. Se trata de una elección que beneficia en gran medida al medio ambiente, por lo que debe tenerse en cuenta.
- Desaparecen o son reciclados. Los materiales de este tipo tienen dos salidas: o bien se utilizan para compost y se degrada, regresando al medio ambiente en forma de los elementos que los componían originalmente; o bien se reciclan, pudiendo utilizarse para fabricar otros materiales y objetos.
Desventajas de los materiales biodegradables
Si bien los materiales biodegradables son una solución muy interesante, también existen ciertos inconvenientes o desventajas de su uso:
- No acaban en los sistemas adecuados de compostaje. Es posible que estos materiales no acaben en el lugar adecuado para trasformarse en compost y destinarse al uso agrícola, por lo que no servirían para este fin.
- Pocos bioplásticos son derivados de residuos agrícolas. Algunos bioplásticos pueden compostarse porque su origen son residuos agrícolas pero, a día de hoy, no se trata de la mayoría.
- El reciclaje es complicado. Al igual que ocurre con el vidrio, en las plantas de reciclaje se emplea una gran cantidad de energía.